¡buenos días Vida!
"La única función del Espíritu Santo es facilitar la comunicación. Para poder reestablecerla, por consiguiente, tiene que eliminar todo lo que la obstaculiza. Por lo tanto no le ocultes nada que pudiera obstaculizarla, pues Él no atacará a tus centinelas. Simplemente llévalos ante Él y permite que su duzura te muestre que en la luz no son temibles y que no pueden servir de guardianes de las tenebrosas puertas tras las cuales no hay nada que se encuentre celosamente oculto. Abramos todas las puertas y dejemos que entre la luz a raudales. En el templo de Dios no hay recintos secretos. Sus puertas están abiertas de par en par para recibir a Su Hijo. Nadie puede dejar de acudir allí donde Dios lo ha llamado a menos que el mismo le de la expalda a la bienvenida que le extiende su Padre."
Libro de Texto Cap. 14.VI.8
Un Curso de Milagros
A Course in Miracles
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Ponlo en sus manos
Mi vacuna contra la influencia
El cartero siempre llama dos veces
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